El Libro de la Semana XLI: Casi el Paraíso

Un gran alboroto se extiende en la Ciudad de México de mediados del s.XX: ¡el Conde italiano Hugo Conti ha llegado a la ciudad y tiene intenciones de quedarse una buena temporada! Inmediatamente las familias "bien" tratan por todos los medios de estar presentes donde él está. Las secciones de "sociales" de todos los periódicos lo siguen y fotografían a cada paso, cosa que las familias de alcurnia quieren aprovechar.
Sin embargo, algo pasa tras bambalinas: Hugo Conti no es un conde. Es un estafador y vividor que llega a México y se aprovecha de la gente que, a su vez, quiere aprovecharse de su imagen. Sin tener la necesidad de gastar un solo centavo, Conti vive en los hoteles más lujosos, come en los restaurantes más caros y finos y viaja a las mejores playas de México, conviviendo con las personalidades más ricas y poderosas del país. No es de extrañar que Hugo Conti considere que México es Casi el Paraíso.
Una novela donde se refleja la sociedad del México de mediados de la década de 1950. Un México en medio del Priísmo y de injusticias sociales, pero con abundancia de dinero gracias al "Milagro Mexicano" (México se volvió proveedor de los países que intervinieron en la Segunda Guerra Mundial y su derrama económica era abundante). Sin embargo, Casi el Paraíso no se limita a México únicamente ya que sociedades como la descrita pueden encontrarse en muchos países en diversos momentos de la historia. En general, la novela puede ubicarse en prácticamente cualquier país de latinoamérica.
Luis Spota |
Todos los personajes que conoció en su adolescencia y en su trabajo como periodista están reflejados en sus novelas. En Casi el Paraíso habla de la sociedad de la "alta". En Palabras Mayores nos cuenta con pelos y señales la forma en que el presidente en turno designaba a su sucesor. En Retrato Hablado nos muestra los entretelones de los que tenían el poder económico... En fin, a lo largo de sus novelas, Luis Spota nos hace un retrato fiel no sólo de México de los 50s y 60s, sino de toda latinoamérica.
Aunque no sean mexicanos, vale la pena leerlo, créanme!
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