El Libro de la Semana XLVIII: Don Quijote de la Mancha

(Esta entrada apareció el 28 de febrero de 2008, y originalmente fue la entrada 71 del Libro de la Semana. La juntaré con la segunda parte)

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Bueno. Le he estado dando vueltas a poner una entrada sobre la que es considerada la obra cumbre de la literatura española. Primero pensé ponerla en la entrada No. 52, celebrando un año del Libro de la Semana. Pero como no las numeraba, nunca me enteré y pasé del 52. Así que la entrada 71 es tan buena como cualquier otra. Lo cierto es que voy a hablar en esta ocasión de la Primera Parte de "El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha", aparecido en 1605, y la semana entrante hablaré de la Segunda Parte, publicada diez años después.

Lectura continuada de El Quijote Y es que hablar de Don Quijote es hablar mucho más que de un libro. Es una imagen y un personaje universal que ha sido inspiración para miles y miles de obras, libros, pinturas, esculturas, películas, ópera y un largo etc. Ahora, alguien me dijo que a La Biblia, a Don Quijote y a Marx todo el mundo los cita, pero nadie los ha leído (confieso que me falta leer a Marx... ¿da igual Groucho Marx?), entonces, ¿qué es lo que hace que a Don Quijote lo conozca incluso gente que en su vida ha abierto un libro? ¿Qué lo hace tan importante y memorable?

Miguel de Cervantes Saavedra tuvo una vida digna de un libro. Luchó contra los moros y fue capturado y se pidió recompensa por su vida. Regresó a su casa y su familia con una mano menos y cargado de deudas. Desesperado, le pidió al rey que, como pago por su servicio en la guerra, le otorgara unas tierras en América (unos dicen que le tenía echado el ojo a algún terreno en lo que hoy es México, pero son sólo especulaciones). Afortunadamente para la humanidad, se le negó la petición (lo malo fue que lo hicieron de una forma un tanto burlona) y Cervantes tuvo que ponerse a escribir para salir de deudas.

Don Quijote es su obra más conocida y en ella incluye muchas historias, algunas que escuchaba en el campo y otras que él mismo vivió. Expone las ideas y contradicciones de la gente común de la época (que en mucho no han cambiado) y sus ideas propias de lo que debería ser la sociedad. Es interesante destacar que Cervantes pone a muchas mujeres que son independientes y muy seguras, que no necesitan a un hombre para vivir y sobresalir (como era lo que se pensaba en la época), y al mismo tiempo escribe de una forma muy misógina, tachando a las mujeres como poco inteligentes, chismosas e interesadas.

Muchas aventuras tiene esta primera parte (no sólo la de los molinos de viento, que por otra parte es muy corta). Básicamente, todo se desarrolla en dos lugares: Una venta, a la que Don Quijote confunde con un castillo, y la Sierra Morena (¡sí! Aquella de la que, Cielito Lindo, vienen bajando un par de ojitos verdes, Cielito Lindo, de contrabando... ¿Sabían que esa canción es española y no mexicana?) En el camino se encuentran con muchos personajes que narran su propia historia y algunas son muy divertidas, otras muy trágicas, ¡pero todas muy buenas!

Les voy a contar mi episodio favorito, con el que me moría de risa:

Don Quijote y Sancho se van a dormir, después de un largo día, y, como no hay más lugar en la venta, se quedan en un cuarto donde normalmente se quedan los cabreros. Uno de ellos ha citado a la buenaza de Maritormes, una moza asturiana, tuerta de un ojo y el otro no sano, casi sin cuello y chata (¡guapa, la chamaca!), pero que por unas monedas cedía a regalar algo de amor a los pobres cabreros. En la noche cerrada no se veía un palmo de narices. Don Quijote escucha (y siente) que entra una mujer y piensa que es la hija del posadero (Don Quijote cree que ella se enamoró de él por ser caballero, aunque la realidad es que a la hija sólo le da risa). Tratando de salvar el honor de la doncella, la toma por un brazo y comienza a explicarle que su amor es imposible pues se debe a la sin par Dulcinea del Toboso. El cabrero, pensando que le quitaban a la muchacha, empieza a pelearse con Don Quijote, y Maritormes trata de zafarse, y cae encima del dormido Sancho Panza, quien sólo siente que le caen encima y comienza a tirar golpes, aún dormido. El escándalo es tal que el dueño de la venta va a investigar qué pasa. Tanto el cabrero como Maritormes, espantados de la posible furia del ventero, huyen sin hacer ruido y cuando el ventero llega con la luz, sólo están Don Quijote y Sancho, ambos apaleados y jurando que sostuvieron una batalla con unos demonios.

Y es que si algo tiene el Quijote, que lo ha hecho una obra inmortal, es que es un libro muy divertido y entretenido. Nada de la idea preconcebida de un libro aburridísimo y complicado (lo más complicado es entender algunas expresiones y palabras, pero la edición del IV aniversario de la obra contiene las notas que ayudan a entenderla).

Por supuesto, el personaje de Don Quijote y su idea de un mundo mejor ha sido analizada miles de veces y explicado porqué nos sentimos tan identificados con él. Los invito a que lo lean y se den cuenta de que si bien el libro tiene cientos de incongruencias, es una lectura apasionante y muy entretenida.
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(Ahora, la segunda parte. Esta entrada se publicó originalmente el 4 de marzo de 2008)
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Mucho se queja la industria del disco y de los libros del plagio y de la piratería. Si bien, es un azote, lo cierto es que no es nuevo.


Resultado de imagen para Segundo tomo de las aventuras del ingenioso hidalgo Don Quixote de la Mancha, compuesto por el licenciado Alonso Fernández de Avellaneda, natural de TordesillasEn 1614 y gracias al inusitado éxito de Don Quijote, apareció un libro titulado Segundo tomo de las aventuras del ingenioso hidalgo Don Quixote de la Mancha, compuesto por el licenciado Alonso Fernández de Avellaneda, natural de Tordesillas . Si bien no fue el primer libro que se colgaba del Quijote, sí fue muy popular y el manejo de los personajes, que aparecen como tontos, molestó en sobremanera a Cervantes, quien casulamente, había empezado a escribir ya la segunda parte.


¿Por qué pongo por separado ambas partes? Bueno, todo aquel que haya leído el Quijote se habrá dado cuenta que en verdad son dos libros muy diferentes y es muy interesante ya que es autorreferencial. La historia comienza con Sancho llegando a visitar a Don Quijote para comentarle ¡sobre la novela de Don Quijote de la Mancha! Y así como hablan de la primera parte del Quijote y todo el mundo conoce a caballero y escudero, también se menciona el Quijote apócrifo y se le critica fuertemente.

Y gracias a que todo el mundo conoce ahora a Don Quijote, se produce un fenómeno muy interesante. Ahora Don Quijote deja de ver e inventar cosas (excepto por la Cueva de Montesino, pero ahí se quedó dormido y soñó) y son los que lo rodean quienes quieren hacerle creer que ocurren portentos. El primero, el propio bachiller Sansón Carrasco, quien lo convence de que vuelva a salir como caballero, sólo para después tratar de que regrese luego de combatirlo un par de veces disfrazado él mismo como el Caballero de los Espejos primero y luego como el Caballero de la Blanca Luna. Sancho le hace creer que Dulcinea ha sufrido un hechizo y la han convertido en una rústica aldeana. Unos condes, a cuyos dominios llegan, le hacen creer a Don Quijote que se encuentra en una corte medieval y a Sancho le dan el gobierno de la "ínsula de Barataria" y convencen a Don Quijote de volar en un caballo mágico.

Es evidente que Cervantes recibió muchas críticas y sugerencias de la primera parte y en la segunda explica inconsistencias y corrige las cosas que menos gustaban a la gente (reduce la cantidad de historias alternas y los diálogos "aburridos").

Así, la segunda parte de Don Quijote de la Mancha resulta ser en ocasiones una parodia de la primera parte, en veces una crítica social y en otras una defensa y apología de la propia obra de Cervantes.

Es indiscutible el porqué es una de las obras más importantes de la literatura universal. Don Quijote tiene un encanto que contagia incluso a los mismos personajes del libro y por ende a todo aquel que lo lea.

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